PANORAMA POLÍTICO
por Carlos Ergueta
¿Blooper o un deseo escondido?
La diputada kirchnerista, Diana Conti, cometió un blooper o quizá puso sobre la mesa un deseo escondido entre los sectores ultrakirchneristas que rodean a la presidenta Cristina Fernández de perpetuarla en el poder.
Dijo, palabras más o palabras menos, que los sectores kirchneristas a los que pertenece desean una reforma constitucional porque quisieran una Cristina eterna.
Ante la resistencia que planteó este operativo “clamor”, la presidenta en su discurso del 1 de marzo dijo que “no se hagan los rulos”: reconoció la imposibilidad de impulsar el proyecto legislativo para la susodicha reforma, al afirmar que es la única presidente que gobierna sin presupuesto, aunque olvidó comentar la experiencia de Raúl Alfonsín en la etapa de la hiperinflación. Planteó que sencillamente no lo puede hacer porque no tiene la mayoría en el Congreso.
Más que un blooper de la diputada Conti, fue un deseo que no se pudo concretar por el rechazo que concitó en la oposición.
Pero el discurso ante la Asamblea legislativa de Cristina reflejó una serie de aciertos, pensando en las elecciones presidenciales de octubre donde posiblemente intentará ser nuevamente candidata a presidenta. Sin dudas las favorables condiciones económicas la ayudan, pero el modelo pareciera estar agotado pese al derrame de dinero clientelar en las capas de menores ingresos.
Es que no hay voluntad política de profundizar una reforma tributaria, porque los impuestos y las alícuotas son las mismas que en la gestión de Cavallo. Pobres y ricos siguen pagando el 21 por ciento del impuesto al IVA; los trabajadores que superen los 4 mil pesos de salarios pagan el mismo gravamen a las ganancias que un alto ejecutivo.
No hay una decisión de reactivar la industria nacional –salvo la automotriz que está traccionada por Brasil-, tal como lo dijo Pino Solanas, se compran aviones en el exterior y no se produce en el ex área Militar Córdoba. No hay atisbos de mejorar el sistema ferroviario para que realmente se convierta en una alternativa a las rutas. Los bancos son las grandes empresas que obtienen suculentas ganancias prestando al 30 por ciento y recibiendo plazos fijos al 10 por ciento.
En fin si hubiera que enumerar ítems serían varios los que indican que en muchas cosas nada cambió y que en otras mantienen una economía que lentamente va reduciendo su superávit comercial. La presidenta aplica magistralmente la fórmula del escritor Italiano, Lampedussa, que en su libro Il Gatopardo planteaba la tesis de que todo cambie, para que nada cambie.
Mientras tanto ya la Coalición Cívica de Lilita Carrió tiene su candidata que es ella misma; el Frente Unidos del Sur, lo tiene a Pino Solanas que en Córdoba intenta armar un acuerdo con el inefable Luís Juez; en tanto que los radicales dirimirán en abril unas pre-primarias entre Ernesto Sanz y Ricardo Alfonsín, mientras que en la interna de agosto –si es que se realizan- el ganador se tendrá que enfrentar con Julio Cobos, que no aceptó ir a las primarias adelantadas.
LA PROVINCIA
En Córdoba hay tres candidatos instalados: José Manuel de la Sota de Unión por Córdoba; Luís Juez por el Frente Cívico y Oscar Aguad del radicalismo.
De la Sota aún no ha dicho que se postulará, pero en última instancia es un acuerdo tácito. Oscar Aguad deberá esperar las elecciones de abril en el partido, pero es casi el seguro candidato que presenta el centenario partido. En tanto el Frente Cívico de Luís Juez va acompañado en su fórmula por Marcelino Gatica, hombre del interior, intendente de Jesús María que busca arrastrar los votos radicales en una geografía que no le es favorable a Juez.
Tanto De la Sota como Juez, ambos provenientes del peronismo, de fuerte antikirchnerismo -en apariencia visceral- se han tornado permeables al discurso de Cristina Fernández. Habría que preguntarle, en especial a Luís Juez, como esto se compatibiliza con una alianza con Pino Solanas.
RÍO CEBALLOS
El radicalismo gobierna la ciudad. Gaspar Lemos se presentará a un tercer mandato: segundo consecutivo.
No obstante habrá internas. Es que el manejo político de los operadores de Lemos se asemeja a un elefante intentado ordenar un bazar de artículos de porcelana. De lo contrario no se entiende como a Carmen Tolosa le ofrecieron “en prenda de unidad” el quinto lugar en la lista de concejales, cuando el triunfador en las elecciones obtiene solo cuatro bancas. Eso y decirle a una concejal que había ganado en las internas anteriores, la minoría: “no te queremos en la lista”, porque además implicaba desplazarla del escenario político. Sin dudas una jugada torpe.
Muchas veces las decisiones prácticas tienen un efecto superior al de mil palabras.
Por lo tanto Tolosa irá nuevamente a internas, esta vez enfrentando a Augusto Lartigue –acompañado entre otros por Ada Aragón King y con la llamativa ausencia de Raquel Nocelli-, y a la billetera del Intendente Gaspar Lemos.
Precisamente Tolosa al redoblar su apuesta nos confirmó el pasado 4 de marzo el apoyo a su postulación de Tomás “Toto” Campos, uno de los referentes del vecinalismo local y que fuera en la última etapa de la gestión de Sergio Spicogna, su secretario de Obras Públicas.
Si bien no lo acompañará en la lista, Tolosa incorporaría, abriendo el abanico político, a un vecinalista en la interna del próximo 10 de abril. Este apoyo de un referente no radical duplica la apuesta de Tolosa frente a Lemos, porque también otra referente del peronismo, y que fuera candidata a Intendente por el Nupas –Sonia Loza- le brindó su apoyo, aunque no podrá participar en las internas por no ser ni independiente ni afiliada radical, pertenece al justicialismo.
Sin dudas estos dos acuerdos le dan un sesgo muy interesante y pone al rojo vivo la interna radical.
Cabe acotar que la situación en el radicalismo es complicada, incluso para el propio Lemos que sólo tiene asegurado como candidato a concejal a José Luís Chessa, pero de la vieja bancada posiblemente no queden otros: Susana Lobos no tiene definido su rumbo político, al igual que la socialista Valeria Restelli.
En tanto el peronismo pareciera tener más clara su situación. Nuevamente Sergio Spicogna intentará ir por la intendencia, y ha anudado un acuerdo con el ex Nupas “Chichi” Murúa y con Alberto Bustamante –que en la gestión anterior tuviera un bloque unipersonal-; además de acompañarlo dos colaboradores como Marcos Díaz y Eduardo Baldassi. Es decir en el peronismo tampoco hay un recambio generacional.
Algunos integrantes de la lista han pertenecido al gabinete de Spicogna y son hombres del peronismo, pero otros por distintas circunstancias no participaron en la anterior gestión del referente de De la Sota en Río Ceballos, tal es el caso de Murúa y de Alberto Bustamante con los cuales ahora Spicogna cierra un círculo de unidad en este espacio político
A fin este mes y abril serán muy intensos en cuanto a definiciones políticas en nuestra ciudad.
