Mirador de Aldea

Capacitación sobre alcoholemia

El sábado 6 de octubre desde las 9 horas, el Ente Intermunicipal de Control Sierras Chicas dió comienzo a una capacitación gratuita sobre control de alcoholemia en la localidad de Unquillo.

Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo el Intendente de la ciudad  Germán Jalil. Estuvieron presentes el Secretario de Gobierno Luis Carrizo, el presidente del Ente Intermunicipal Marcos Mingorance, el Ingeniero Alejandro Guzmán Vega, asesor técnico del Ente y miembros de la Dirección General de la Policía Caminera de la Provincia de Córdoba.

Docentes del Ente Intermunicipal lo integran 11 municipios de Sierras Chicas: Malvinas Argentina, La Calera, Villa Allende, Mendiolaza, Unquillo, Río Ceballos, Salsipuedes, El Manzano, Agua de Oro, Colonia Caroya y Juárez Célman. Docentes del Ente capacitaron de manera gratuita, con módulos teórico – prácticos, a empleados aspirantes al título de autoridad de control municipal.

También estuvieron incluidas en la capacitación autoridades de control municipal y efectivos policiales de la localidad de Unquillo.

Mediante la colaboración de la policía caminera, se procedió a un despliegue de control y educación vial en 6 puntos de control a lo largo de la Avenida San Martín.             

¿Qué fue de las bicisendas?

Recibimos en la dirección de mail de Ñú Porá el correo de un lector que se pregunta qué pasó con la ciclovías y bicisendas en Río Ceballos. Reproducimos aquí lo que nos hicieron llegar y trasladamos las preguntas a los funcionarios rioceballenses para que nos cuenten  en qué quedó o cómo va el proyecto que pretende trazar sendas diferenciadas para bicicletas.

 Hace alrededor de un año, la administración que sucedió a la radical propició una serie de encuentros vecinales en que se expusieron las principales líneas de acción y se invitó a los vecinos a proponer ideas y planes. Asistí a uno de ellos, motivado por el hecho de que se trataría un asunto que me ocupa desde años atrás: la creación de ciclovías y bicisendas. El plan se desarrollaría en dos etapas: la primera, de ejecución inmediata, una bicisenda que uniría los dos puentes de la Av. San Martín, previa liberación de una mano (es decir, eliminación del estacionamiento.) La segunda, más pretenciosa, una ciclovía que uniría el paredón del dique de La Quebrada con el cementerio (límite del ejido municipal.) Ésta fue recorrida algunos días después con personal de Obras Públicas y con mi asesoramiento, de lo que resultó que es perfectamente factible, y serviría para unir los dos extremos de la ciudad en bicicleta, lo que pondría a Río Ceballos en la lista de las ciudades que promueven su uso como una manera de reducir el caos y la polución causada por los automotores, amén de beneficiar la salud de los usuarios.

A un año de ello, no existe un sólo metro de bicisenda, ni menos aún de ciclovía. La cuestión es: si no se pensaba tomarse la cosa en serio ¿para qué ocupar el tiempo de los vecinos y gastar dinero del erario en simposios, salarios, computadoras, dibujos y otras mil zarandajas? Si, como se nos dice hasta el hartazgo, no hay dinero siquiera para pintar 2 km de bicisendas, no tiene sentido tirarlo en planes que quedan en el papel. Contrario sensu: si se planificó una obra y se la propuso a los vecinos ¿por qué no se la realiza? ¿imprevisión? ¿falta de criterio? Vaya uno a saber.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                               

Proyecto por el agua

Mediante un informe, el Grupo Intercuencas Sostenibles y el Foro Ambiental Córdoba plantearon la necesidad de un manejo integrado de las cuencas de Sierras Chicas a autoridades provinciales de Recursos Hídricos y de Ambiente.
El informe describe la problemática de la falta de agua en las localidades de Sierras Chicas, relacionada a la dependencia de cabeceras de cuenca pequeñas para abastecer sus necesidades de líquido, las que cuentan con una vegetación nativa muy deteriorada, y al gran aumento poblacional. 
Los profesionales entienden que los puntos de solución pasan por la necesidad de una visión integrada del territorio, la generación de consensos entre intendentes y jefes comunales, y la promoción de la participación y consenso con la población. 
En ese ámbito, resaltan la necesidad de proteger la vegetación nativa, ampliar las reservas hídricas, y frenar emprendimientos inmobiliarios de gran impacto ambiental.
Además de señalar la necesidad de diseñar un plan educativo sobre el uso racional del agua, tareas de concientización y un plan de ordenamiento territorial, haciendo hincapié en la reparación del acueducto Los Molinos-Córdoba y descartar el proyecto de acueducto Paraná-Córdoba.

¿Qué más hay que esperar?

Un joven intenta una maniobra con su motocicleta. Al querer pasar un automóvil, se desestabiliza y termina debajo de un colectivo de la empresa Intercórdoba. Lamentablemente el sujeto fallece en el acto, creando gran conmoción en los ocupantes del rodado mayor.

El hecho se produjo en Avenida Tissera, barrio El Talar de Mendiolaza. Esta arteria, que permite gran fluidez en el tránsito, fue pavimentada e inaugurada hace poco más de un año, cuando todavía era gobernador Schiaretti. El propio gobernador, con parte de sus colaboradores y funcionarios de Mendiolaza, estuvo en el corte de cinta de tan ansiada obra.

Recuerdo haber estado presente ese día. También recuerdo haber dialogado con un funcionario local que me decía de lo importante y necesario de la pavimentación de la Tissera. Además, reconoció, en ese momento, que era una ruta en la que se maneja a gran velocidad por eso era necesario (y se iba a hacer en breve) la construcción de instrumentos que permitieran la regulación o aminoramiento de la velocidad.

Más de 12 meses después no hay nada. Y eso es lo que están reclamando los vecinos de El Talar: que se cumpla con lo prometido, que se realicen obras complementarias para evitar nuevos hechos de tránsito y cuidar a toda la población. 

Otra vez sopa

Luego de la lluvia, vuelven las quejas y reclamos. Es que vecinos de ciertos sectores de Villa Allende están cansados de solicitar que se realice un constante mantenimiento a la calles, sobre todo las de tierra, de algunos barrios.

Y como no se hacen las obras, en épocas de agua se torna prácticamente imposible transitar por zonas de la localidad. Ni hablar lo complicado que se les hace a aquellos que no tienen vehículo y que deben andar a los saltos esquivando charcos y veredas inundadas.

Si bien el reclamo se nos hizo llevar de pobladores de Villa Allende, lo cierto es que la situación mencionada se repite en casi todas las ciudades de Sierras Chicas.