Los jóvenes y la
ampliación de derechos
Alumnos
de colegios de Río Ceballos, Unquillo, y Agua de Oro, realizaron en Río
Caballos una jornada de intervención artística y un taller sobre el voto a los
dieciséis años. La actividad se desarrolló el sábado 28 de setiembre y fue
organizada por los mismos estudiantes. La intención fue poner en común,
conocer, discutir y argumentar la nueva legislación nacional que permite a los
jóvenes de entre 16 y 17, si así lo quisieran, a participar con su voto de las
elecciones.
Antes
de la jornada, Ñu Porá junto a dos representantes de las instituciones
educativas, a un ex alumno participante y a una estudiante universitaria, que
ayudó en la organización de la modalidad de trabajo, para que contaran de qué
se trató lo que planificaron, sobre sus opiniones en relación al voto
adolescente y sobre sus concepciones de participación política.
Dialogamos con Sol
Jornet, del Ipem 352 de Río Ceballos, Matías Subirela, del Ipem 23 de Unquillo,
Francisco Cánepa, egresado, y Paula Bernabé, estudiante de cine y sociología.
La intención es que
nos cuenten qué es lo que están organizando
Sol Jornet: “Estuvimos charlando
sobre la Ley de voto a los 16, que generó todo una polémica, y empezamos a
pensar qué podíamos hacer para informar y discutir esto del voto joven, por qué
alguno estaban a favor y otros no. La idea es dar a conocer que tenemos nuevos
derechos como jóvenes y de qué se trata este mundo de las elecciones.
Matías Subirela: “Más que todo informar. Hay muchos chicos
que no fueron a votar porque no sabían cómo era, otros no sabían que era
optativo”.
¿Han podido trabajar
la temática en el colegio?
SJ: “Se generaron muchas
polémicas en el cole. Se habló mucho de votar a los 16 años. Profesores estaban
en contra porque decían que no, que iba a ser para problemas, que no estábamos
capacitados. Después nos dimos cuenta que no, que al no ser obligatorio el ir a
votar, cada uno puede decidir si ir o no, e informarse que es todo un proceso.
Desde Nación llegaron cajas con materiales con actividades para pensar la ley y
las elecciones y no se han podido trabajar porque los docentes no lo tienen
como prioridad”.
Francisco Cánepa: “Generalmente, está el grupito de pibes que
no les importa votar y después andan hablando ‘ah, mirá este gobierno’. Uno
cuando va a votar, elige un representante. Hacerle llegar a los pibes que es
importante participar, lo que es la democracia”.
¿Por qué la negativa
de algunos docente?
SJ: “Hay miedo de hablar también. Porque hablar del voto a
los 16 es hablar de política y la política, todavía, sigue siendo una mala
palabra. Hablar de política es politizar la escuela, que tampoco es malo,
porque en un centro de estudiantes hay política. Tienen miedo a hablar de
políticas partidarias pero a la vez está el profesor que se está quejando todo
el tiempo de cualquier gobierno por el sueldo que recibe. Hay miedo de generar
la instancia de participación, que se hable de política partidaria. Por eso
pensamos en hacer esta charla, para no solo hablar ciertas políticas sino de lo
que es participar”.
¿Qué es lo que van a
hacer puntalmente?
MS: “La actividad que
vamos a llevar a cabo a las 12 del mediodía en el poli de Río Ceballos es la
pintada de un mural sobre el tema del voto joven. Luego, un almuerzo y
terminamos en Casa Azul donde haremos una charla”.
FC: “En la charla queremos ampliar lo del voto joven, sobre
democracia, y llegar a que los pibes de cómo se conforma un partido político”.
¿Charla a cargo de
quién y dirigida a quién?
SJ: “Las charlas están a cargo de nosotros y es para todos
los jóvenes que tengan ganas de charlar un rato y de pintar en el mural. Las
técnicas que vamos a usar son de educación popular, al estilo de Paulo Freire,
con dinámicas de pensar la participación, la democracia desde todos y la
historia del voto en argentina. En base a eso, nos vamos a dividir en grupos y
cada grupo va a armar su propio partido, van a tener que inventarle un nombre,
un color, sus propuestas, sus ministerios. La idea es esa, pensar qué sería
pertenecer a un partido político y qué cosas a nosotros como jóvenes nos
gustaría”.
¿Funciona centro de
estudiantes en sus colegios?
SJ:
“Sí. En mi colegio, desde el año pasado.
MS: “Yo
soy presidente del centro en mi colegio”.
¿Cómo relacionan el centro
con el voto a los 16 años?
MS: “La
relación en la de participar de la democracia, la de saber que podemos elegir y
proponer. El centro de estudiantes sirve para que los chicos comencemos a
aprender y participar”
FC: “La
formación de centros de estudiantes y la ampliación del voto genera una
participación en los jóvenes que nunca ocurrió. Y no es obligatorio. Los
jóvenes participan si tienen ganas o por sus propias creencias de querer ocupar
un lugar, por convicción”.
SJ: “La
mayor relación es que los jóvenes se dan cuenta que cuando están en una escuela
conocen el ambiente de un centro de estudiantes y empiezan a participar.
Participan en política en la escuela y comienzan a iniciarse en esto de elegir
a sus representantes. Se trata de construir una escuela mejor. Y con el voto a
los 16 pasa lo mismo pero a mayor escala”.
¿Cómo se responde a:
‘podemos votar pero no manejar con 16 años’?
FC: “Es
que no significa ser chico o grande poder votar. Creo que está muy descalificado.
Estás generando una participación en una sociedad. Si vos tenés las cualidades
para manejar, no creo que se determine de la misma manera que un voto, que
tiene que ver con una cuestión moral”
SJ: “He
tenido esa discusión con mis compañeros, y yo pensaba: el voto a los 16 es
opcional, uno puede decidir si quiero participar o no, y entrar a un boliche
también es decisión tuya. Pero que pasa, no tienen el mismo compromiso social
votar que ir a un boliche o manejar. Cada cosa tiene su legislación. El Estado
te está invitando a participar”.
Y para los adultos, todavía
no tienen edad para votar
MS:
“Hay muchos prejuicios. A los jóvenes se nos vé como incapaces, muchos adultos
me la han dado a entender. Yo trato de decirles que sí, que podemos estar
capacitados para votar. Es interesante poder participar, y que los jóvenes sean
parte de la democracia”.
¿Cómo continúan luego de
esta actividad que organizaron?
SJ: “La
idea es generar el debate en los jóvenes de Río Caballos y alrededores. Venimos
pensando en hacer cosas desde abril pero nunca nos daban los tiempos para poder
concretarlo. De hecho, hay una red que nuclea a los centros de estudiantes de
Río Ceballos, y la intención es poder hacer avanzar con charlas en todos los
colegios sobre el voto joven, y abrir la discusión a la sociedad”.
FC: “Lo
del taller es una meta, y tenemos muchas más”.
Sol, aún no tenés 16 años,
¿qué te lleva a movilizarte por el voto joven cuando vos todavía no podes
ejercerlo?
SJ:
“Cuando me enteré de le nueva ley, me dieron muchas ganas de participar y de
votar. Participando de un centro de estudiantes, lo del voto a los 16 me
pareció súper involucrador. Que el Estado te considere capaz de participar de
las decisiones de todos, para mí es muy lindo eso. Me siento convocada y con
ganas de construir algo que quiero. No voy a tener la oportunidad de votar
ahora pero las próximas elecciones voy a tener 17.
¿Cómo ven el tema de bajar
la edad de imputabilidad?
FC: “Yo
creo que es una herramienta para seguir persiguiendo a los jóvenes”.
SJ: “Es
una forma de reprimir a los jóvenes. No construye el reprimir. No digo que el
joven que cometa algún delito, no tenga sanción. El joven que llega a cometer
una infracción esta influido por el aspecto social. El sujeto no hace
mágicamente algo por sí solo, sino que hay un contexto que lo determina. Si el
Estado te convoca a participar es porque hay un contexto social que lo
posibilitó, porque los jóvenes vienen luchando por ello. El joven que comete
algún crimen, su contexto la excluye, lo margina. Entonces, ¿los vas a marginar
más al pibe que está con problemas? Para mí no, bajar la edad de imputabilidad
no va a construir nada. Al joven con problemas se lo tiene que ayudar, no excluir.
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